Algunas flores en un jarrón frente a un espejo.
2018. Museo Julio Marc.

Algunas flores en un jarrón frente al espejo (2018)
Esta obra parte del diálogo entre dos genealogías: la de mi propia familia y la de los bodegones florales de Jan Brueghel el Viejo y Jan Brueghel el Joven. La instalación se organiza en dos escenas simétricas, como un reflejo entre padre e hijo, retomando esa línea de continuidad y aprendizaje que atraviesa la historia del arte y también mi propia experiencia familiar.
En cada lado, floreros de la colección del museo fueron intervenidos con flores tejidas, inspiradas en las composiciones flamencas. La escena del “padre” muestra algunas flores caídas y un florero dañado, mientras que la del “hijo” mantiene su conjunto completo, marcando sutilmente la diferencia entre generaciones y los modos en que cada una recibe y transforma lo heredado.
Al trabajar en esta doble estructura, me interesó pensar la transmisión artística como un gesto que se repite, se adapta y se desplaza, un puente entre pasado y presente donde la tradición flamenca se enlaza con mis propios vínculos familiares.



